Más de 5 años lleva la compañía británica SSC (Super Sonic Car) tratando de poner a punto tanto el vehículo como la pista para una hazaña que se sale de todos los parámetros racionales y físicos: impulsar un carro a más de 1.600 kilómetros por hora.
Esa escalofriante velocidad es la que se supone que desarrollará el Bloodhound, un vehículo con pinta de misil, que el próximo año y en el desierto desierto de Hakskeen Pan de Sudáfrica intentará una vez más poner a prueba la confiabilidad de su fabricación, la potencia de su configuración mecánica y los nervios de acero de su piloto Andy Green.

Bloodhound SSC 2015
The city that never sleeps is taking a nap.
Publicado por Dacia 1300 New York en Domingo, 12 de abril de 2020
Este intento demencial por alcanzar velocidades supersónicas arrancó desde 2007 y tres años más tarde se presentó por primera vez a los medios de comunicación, en una ceremonia similar a la que se realizó el pasado viernes.
Desde entonces, algunos problemas en su fabricación y confiabilidad y otros referentes a las condiciones de la pista, entre ellos el clima, retrasaron, aplazaron e impidieron que el poderoso Bloodhound SSC alcanzara su objetivo. Pero esta vez, todo está casi listo.

Bloodhound SSC 2015
Para alcanzar este récord orbital, el Bloodhound SSC dispondrá de 135.000 caballos de potencia, una extravagante cifra que será el resultado del trabajo de tres motores: un Rolls-Royce EJ200 del avión de combate Eurofighter Typhoon, un cohete híbrido de la compañía noruega Nammo y un 'modesto' V8 Supercargado de la marca Jaguar.
Esta cifra lo ubica también al alcance de otro récord que a la firma SSC no le interesa mucho: el del automóvil con mayor potencia en la historia.

Bloodhound SSC 2015
Sin embargo falta por probar el trabajo conjunto de las tres unidades, cosa que se hará el próximo año, y la adecuación de varias piezas aerodinámicas pequeñas, como alerones y frenos de aire para detener a esta mole de más de 6 toneladas una vez alcance velocidades cercanas a los 1000 kph.
Entre las curiosidades del Bloodhound están el sistema de frenos compuestos por tres variantes entre los que se incluye un paracaídas, un tablero con relojes análogos de la marca Rolex, siete extintores empotrados en diferentes puntos del vehículo por si hay problemas(?) y en caso de que se necesite rescatar al piloto, unas sierras capaces de cortar titanio en menos de 10 segundos y que están montadas en vehículos que alcanzan los 250 kph.

Bloodhound SSC 2015
Con este equipo el Bloodhound se prepara para batir el registro actual al vehículo más veloz del planeta, el Thrust, que hizo unos increíbles 1.228 kph el 15 de octubre de 1997, primer vehículo súper sónico de la misma compañía SSC, y que estuvo al mando del mismo piloto Andy Green en el desierto desierto de Black Rock en Nevada, EE.UU. El que es caballero, repite.