Hay varios modelos conceptuales que han sentado precedentes al ofrecer distintas alternativas de movilidad unipersonal prácticas y sostenibles, reduciendo físicamente las diferencias entre motocicletas y automóviles.
El Toyota i-ROAD cabe dentro de esta categoría. Se trata de un cuadriciclo eléctrico que se destaca por su bajo consumo energético, de dimensiones muy compactas que le permiten moverse con total libertad por las cada vez más congestionadas calles de las metrópolis.
Las cuatro ruedas del Toyota i-ROAD están dispuestas de tal forma que unos engranajes y un motor de inclinación le permiten ladearse como si fuera una motocicleta, mejorando su paso por las curvas. El sistema también sirve para mejorar la estabilidad en línea recta, como control adaptativo de las suspensiones.
Es más, como todos los movimientos están perfectamente calculados por un ECU, para conducir el i-ROAD no se requiere una habilidad especial, un gran manejo del equilibrio, ni experiencia en motocicletas.
El sistema eléctrico del vehículo se basa en dos motores eléctricos de 2 kW ubicados en el tren delantero. A una velocidad promedio de 30 kph se estima una autonomía máxima de 50 kilómetros pero que se reduce a 30 si se circula hasta los 50-60 kph.
Estará entre los prototipos que se presenten durante el Salón de Ginebra 2013, que abre sus puertas la próxima semana.